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miércoles, 12 de marzo de 2014

Roberto se subió a un árbol (anécdota de patrullero, NO ES FICCION)



-Un móvil de 24, ¿Qué otro móvil de 24, para cazadores al 1200?-

-224-

-Gracias señor… no sé como decirle esto pero es una llamada y tenemos que atender; se va a desplazar a cazadores 1232. En la finca un femenino le va a ampliar sobre el extravío de su marido de nombre Roberto-

- ¿…?, eh… ¿me reitera el qtc ( qtc significa mensaje en código Q ) por favor?-

-Cazadores 1232, como primero segundo tercero segundo; un femenino le va  a ampliar sobre el extravío de su marido ¿qsl?-

-QSL, al lugar-



   Llegamos al lugar y nos recibe una mujer, aproximadamente 70 u 80 años vestida con un camisón claro y largo de colores pasteles claros. En la cabeza un pañuelo anudado por atrás escondía un nutrido grupo de ruleros.



-Señora buenas noches, ¿Qué le anda pasando?-

-Es roberto, que se subió a un árbol y ahora se dá cuenta que no puede bajar, antes no le pasaba pero últimamente, se vé que por la edad, ya no aprecia bien las alturas. En fín necesito que ayuden a Roberto a bajar del árbol-

-Bueno, muy bien. ¿y…cual es el árbol al que se subió su marido?-

-¿Marido? ¿Qué marido si soy viuda hace 15 años?-

-Ah disculpe. ¿Cuál es el árbol al que se subió su hijo Roberto?-

-¿Hijo…? Yo tengo 2 hijas pero ninguna se subió al árbol-

   El cabo primero que ya iba perdiendo la paciencia porque ya venía de 12 horas de adicional en una garita inmunda y se le acababa el tacto para hablar con la gente.

-Pero señora, ¿Quién es Roberto entonces y a qué árbol se subió?

-Roberto es mi gato siamés, tiene 12 años y se subió a este árbol ¿vé? Allá arriba está y no se anima a bajar pobrecito-



   La gran puta. Yo estaba de pié apoyado contra el patrullero de brazos cruzados una mano agarraba el codo y la otra el equipo trunking de comunicaciones. Normalmente cuando se trabaja en una “incidencia” como podría calificarse a esta, el chofer se encarga de custodiar el móvil y monitorear las comunicaciones mientras que el encargado intenta solucionar los problemas. En fin comencé a levantar la vista siguiendo el tronco del árbol. Una gran acacia centenaria que parecía no terminar jamás.

   No se veía el gato inmundo. Trato de iluminar el árbol  con la linterna y allí lo ví. Estaba aproximadamente a 12 mts de altura. El árbol tenía ramas desde los 6 mts recién. “Robertito”  visiblemente asustado estaba acurrucado y mirando hacia abajo maullando fuerte.



-¡¡¡ Ah bueeeno!!! – Dijo mi compañero y encargado mirando hacia el animal. El cabo primero tenía experiencia con felinos  bípedos…no cuadrúpedos…me niego a ser más específico.



-224-

-adelante-

-señora, necesito bomberos para cazadores 1232-

-¿Qué acontece en el lugar?-

-Roberto se subió a un árbol y no se anima a bajar y como está muy alto necesito una dotación de bomberos con escaleras para poder llegar hasta el lugar-

-Interpreto que el marido de la denunciante necesita auxilio para bajar de un árbol-

-Eh… ( dubitativo )…Negativo marido señora, es el gato de la denunciante llamado Roberto que necesita ayuda para bajar del árbol-

-¿…?- silencio de radio

-¿Interpretó el qtc operadora?-

Al abrir el micrófono comando radioeléctrico aún se escuchaban las risas de fondo

-Bien interpretado señor. Le envío bomberos y aguardo por la resolución-

-Seguro que esperás la resolución conchuda de mierda- Dijo el cabo primero y luego agregó

-Capaz que hay alguien que en este momento lo están robando, violando o matando y nosotros acá ocupados con el gato de una vieja chota. La gente no piensa antes de llamar, 
-¿vos que decís?- me preguntó

-Que la gente acá cree que somos como los policías yanquis de esos que aparecen por la tele. Que salvan gatitos con helicópteros y equipo avanzado de todo tipo. La verdad es que estamos a años luz de ellos.- Dije mientras bajaba la cabeza resignado y tiraba la radio dentro del patrullero a través de la ventana.



   Ya hablaremos de las diferencias entre las policías. Son atroces y estamos en lo más bajo de la escala aún comparados con policías del tercer mundo porque incluso comparados con fuerzas de África o india ellos no tendrán equipos adecuados ni móviles ni uniformes pero están amparados por la ley. Nosotros tenemos la contra de que encima de estar mal pagos, mal equipados, desmotivados, sin preparación adecuada encima tenemos la justicia en contra. En un procedimiento es más factible que acabemos presos nosotros más tiempo que los cacos.



   30 minutos y cinco cigarrillos después arriba un camión de bomberos con una gran escalera. A cargo de la dotación venía un oficial Principal que por lo general ya no salen a la calle. Los principales se encargan de sacar los servicios y escribir los reportes. A eso sumémosle que eran las tres de la madrugada que visiblemente le habíamos interrumpido el sueño y que no tenía ninguna vida humana que salvar ni casa alguna para destruir.



-¿Qué passsa acá?!- Dijo el Princi poniéndose la campera con mucho desgano

-Buenas noches señor- Dijo el cabo primero- En lo alto de ese árbol hay un gato siamés que hay que rescatar- El suboficial no era tonto sabía que comando le había informado la situación por teléfono y que el Principal nos pedía datos pero sólo para hacernos notar lo molesto que estaba.



-Che Cacho- Gritó el oficial mirando al carro bombero- subí la escalera, trepáte y bajá el gato ese-



   Cacho era el agente bombero más moderno de la dotación, por descarte el mulo y sirviente de todo procedimiento y misión que tuviera que realizar el camión. Resumiendo, Cachito ubica la escala en dirección  al felino y trepa. Al llegar a la altura más alta soportada con seguridad por el equipo se dá cuenta que es insuficiente y que no llega a alcanzar el gato-



-Eh… Jefeee, no llego eh…, ¿que hago?-

Sin inmutarse ni mirarlo siquiera el Princi sentenció

-Armá una línea y tirále-



   Yo que había visto las fuerzas y presiones que manejan los equipos de agua no pude evitar que un ligero escalofrío me bajara por la espalda. Mientras tanto el resto de la dotación ya había armado la manguera  se la habían dado a Cachito la habían conectado y se aprestaban para introducir presión. Esos tipos eran realmente rápidos.



-¿ Señor?- Preguntó el operador del autobomba

-Dale 200- Dijo el Principal sin levantar la vista de una revista de armas que estaba hojeando

-Enterado- Respondió mientras se oía acelerar el inmenso motor del camión



   El techo de la casa de la viejita era como un chalet cortado a la mitad. Un plano inclinado de tejas que descendía hacia la calle y debajo de él  la edificación. Cuando Cacho abrió la válvula de la línea el potentísimo chorro golpea al gato y lo arroja en línea recta directo al tejado. El cuerpo del animal pega en el techo y volando dos o tres tejas. El bombero corta la presión y mira hacia abajo con los ojos muy abiertos al mismo tiempo que con la mano derecha hace un movimiento de vaivén perpendicular al cuello (como de caput- muerto- degollado)  En ese momento veo que el oficial a cargo sale de su letargo y casi preocupado me pregunta



-Che pibe ¿tendrás una bolsa en la patrulla?-



   El cabo primero que estaba con la viejita se apresuró a llevarla hacia adentro de la casa



-Bueno señora se vé que el gatito se asustó con el agua y saltó hacia la casa de los vecinos-

-¿Pero está bien Roberto no?-

-Claro que está bien, por supuesto pero se asustó el gatito y se vé que el agua le sacó el miedo y saltó suavemente hacia uno de los domicilios linderos. Mañana seguramente va a volver a su casa-



   Mientras decía esto el “Cacho” metía los restos del pobre felino dentro de una bolsita de supermercado que dejaron en la parte trasera de la autobomba.

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