El policía (por Emilio Galan)

Para ser policía
debes ser muy educado
servicial, leal y sincero,
distinguido como un rey.
Tus modales calculados
serio siempre ante la gente
esforzado y diligente
siempre amigo de la Ley.

El merece tu respeto
porque también fue un niño
aprendió a guardar secretos
y también a vigilar.
Brinda todo su cariño
porque es padre, esposo, es hijo
y es maestro muy prolijo
militar para enseñar.

En las noches invernales
él camima solitario
va cuidando los fanales
que iluminan la ciudad.
Muchas veces un calvario
puede ser su vida entera
y una lágrima sincera
brotará en la oscuridad.

Cruza valles y montañas
serranías y desiertos
no le teme a la alimaña
merodeando algún corral.
Van sus ojos muy abiertos
porque sabe ser vigía
sabe ser amigo y guía
de magniífica moral.

¿Quieres ser policía?
pues estudia y persevera
sé obediente, sé sincero
sólo así podrás vestir
esa gorra de visera
uniforme de oro azul
consolar al que se pierde
y servir...SIEMPRE SERVIR